Octubre es el mes de la concienciación sobre la diversidad global. Esta celebración nos lleva a recordar el impacto positivo que la diversidad cultural puede tener en nuestra sociedad. Los inicios de esta celebración se remontan a 1948 cuando las Naciones Unidas adoptaron la Declaración Universal de Derechos Humanos en la Asamblea General en París, Francia.
La Declaración representa el primer reconocimiento mundial que debemos recordar y comprender el valor de cada ser humano, independientemente de su nacionalidad, color, raza, sexo, género, país de origen, idioma o condición.
No puedo evitar pensar que, si este concepto es conocimiento global, ¿por qué siento que nuestra sociedad se está quebrando? ¿Por qué se le niegan los derechos humanos básicos a nuestras comunidades de color y otras etnias en todo el mundo? ¿Por qué existen sistemas que penalizan a las personas según el color de su piel? Más importante aún, ¿cómo cambiamos las políticas que perpetúan el racismo sistémico?
Muchos de nosotros conocemos las respuestas, pero a menudo nos sentimos impotentes y silenciados, incluso cuando estamos trabajando por un futuro mejor. ¿Qué podemos hacer para ser parte de la solución? Estas son algunas cosas que comencé a hacer a nivel personal y profesional:
- Educarme. La intolerancia se basa principalmente en el miedo y la ignorancia. Aprender sobre eventos históricos y actuales me está ayudando a comprender cómo llegamos aquí.
- Cambiarme. Entender la causa de estos problemas inició un cambio en mi perspectiva y una mejor comprensión de cómo he contribuido al problema.
- Convertirme en defensor. Al aprender acerca de las causas que me importan, encontré formas de apoyar y trabajar por la diversidad, la equidad y la inclusión (DE&I). Me asocio con amigos personales y organizaciones que comparten la misma pasión en trabajar para nuestras comunidades.
- Entréname. Sé que estos temas son delicados y difíciles de manejar. Reconocí la necesidad de entrenar mi mente para poder ser un aliado y ayudar.
- Reconocer mis propios prejuicios. Los prejuicios inconscientes están en mi cerebro. Años de condicionamiento social me hicieron cómplice del sistema. Reconocer este fusible defectuoso en mi cabeza me está ayudando a cambiar el chip, lo que me permite detenerme, pensar y corregir. Lo más importante es que estoy aprendiendo a tener conversaciones difíciles, a disculparme cuando cometo un error y a crear conexiones significativas.
- Apoyar. Participo en eventos e iniciativas que promueven DE&I para nuestra comunidad. Promuevo conversaciones sobre los temas más importantes en nuestras comunidades de color y otras etnias con amigos, mi familia y mis colegas.
- Ser una aliada. Utilizo mis recursos para crear oportunidades en mi comunidad. Tengo una red de defensores de la diversidad y la inclusión, por lo que sé a quién contactar cuando un individuo o una causa necesita ayuda.
- Denunciar. No tolero la violencia, la discriminación, el racismo o cualquier tipo de acción que pueda dañar a otro ser humano. Sin embargo, algunas acciones son difíciles de ver, como los comentarios pasivos. Como dije antes, es importante capacitar y aprender sobre la perspectiva de los demás para poder comprender sus luchas y ayudarlos.
- Trabajar en organizaciones que promueven el DE&I. Estoy orgullosa de trabajar en Quartz. La cultura y el plan estratégico de la empresa se basan en la diversidad, la equidad y la inclusión. Quartz tiene un Departamento de DE&I encargado de crear un ambiente de trabajo que sea inclusivo, acogedor y culturalmente diverso. Todos en la compañía valoramos las perspectivas de los demás, educamos, mostramos respeto por todos, servimos a nuestra comunidad y evaluamos nuestro progreso. Este mes, Quartz anunció su Posición en Contra del Racismo que expresa el compromiso de la compañía de servir a nuestras comunidades.
Estoy reconociendo mi responsabilidad y mis aportes que, en el pasado, fueron parte del problema. Empecé a trabajar en mí y a ser parte de la solución. Sé que el cambio toma tiempo, pero en mi corazón sé que dar el primer paso, es ganar terreno. Si mi pequeño apoyo puede ayudar a construir comunidades mejores y más fuertes, al unirnos tendremos un futuro mejor.