¿Sabía que estar al aire libre con la naturaleza no sólo mejora su salud física, sino también su salud mental?
No te preocupes, no tienes que subir a una montaña para aprovechar realmente los beneficios de estar al aire libre. Salir al aire libre, aunque sea unos instantes, puede ayudarte a dejar el teléfono y a descansar de los demás factores de estrés que tienes en tu vida diaria. Incluso el ejercicio de bajo impacto, como el yoga o el tai chi, o incluso caminar al aire libre, puede ayudar a estimular tanto la mente como el cuerpo.
¿Qué ocurre en el interior?
Los estudios demuestran que el simple hecho de estar al aire libre puede reducir el cortisol, una hormona del estrés. Un estudio demostró que estar al aire libre ayuda a reducir la presión arterial y la adiponectina, una proteína que ayuda a regular los niveles de azúcar en la sangre.
No todos vivimos en una zona en la que haga suficiente sol todos los días para salir al exterior. También puedes dar un empujón a tu mente y tu espíritu dentro de casa. Sólo necesitas cinco minutos al día con estos cuatro consejos.
1. Siéntate cómodamente y concéntrate en tu respiración.
2. Fíjate en cualquier cosa que te aleje de la respiración, como un cortacésped o el ladrido de un perro, o incluso un pensamiento sobre las actividades del día.
3. Si notas algo más, intenta dejar pasar esa distracción y vuelve a centrar tu atención en la respiración.
4. Tómate el tiempo necesario para respirar profundamente y dirigir tu atención hacia el interior.
Estés donde estés, encontrar formas de alejarte de las pantallas, los plazos o las preocupaciones te ayudará a sentirte mejor y a ser consciente de lo que es realmente importante para tu bienestar.
